El Día Internacional se estableció en 1970, para crear
conciencia sobre los críticos desafíos ambientales que enfrenta
nuestro planeta y movilizar esfuerzos para abordarlo.
La celebración brinda una oportunidad para que individuos,
comunidades, organizaciones y gobiernos se reúnan y
participen en actividades para reparar y sanar ecosistemas, combatir
el cambio climático y preservar la biodiversidad,
para preservar el planeta para las generaciones
futuras.
El mundo no hace lo suficiente
En
una publicación en su plataforma de redes sociales X (anteriormente
conocida como Twitter), el pontífice señaló que su generación ha
legado muchas riquezas monetarias a las generaciones
posteriores, pero ha hecho poco para proteger el planeta.
También
comentó sobre el vínculo entre los problemas ambientales actuales
y los numerosos conflictos que azotan el mundo.
"Nuestra generación ha legado muchas riquezas, pero no
hemos sabido proteger el planeta y no
estamos salvaguardando la paz. Estamos
llamados a convertirnos en artesanos y cuidadores de nuestra Casa común,
la Tierra, que "se está arruinando".
La publicación del Papa se hizo eco de sus
propias palabras en la encíclica Laudato si', de 2015, sobre el cuidado de nuestra Casa
Común y su llamado a las personas, comunidades y
gobiernos a cuidar la naturaleza.
Día de la Tierra 2024, por un mundo libre de plásticos
Cada
año, el Día de la Tierra tiene un tema específico para
llamar la atención mundial sobre cuestiones ambientales urgentes. Bajo
el lema "Planeta vs. Plásticos", esta 54ª
edición se centra en la contaminación plástica y en la urgente
necesidad de reducir su uso y producción.
Más
allá de sus implicaciones ambientales, la proliferación de plásticos plantea
una amenaza significativa para la salud humana, similar a los desafíos que
plantea el cambio climático.
400 millones de toneladas métricas de plástico al año
Los seres
humanos producimos más de 400 millones de toneladas métricas de plástico al
año, que equivale aproximadamente al peso de todos los seres
humanos del planeta.
Solo
el 9% se recicla y alrededor del 22% de los desechos
plásticos en todo el mundo no se recolectan,
se eliminan de manera inadecuada o terminan
como basura.
A
medida que los plásticos se degradan a microplásticos, liberan sustancias
químicas tóxicas en los ecosistemas,
contaminando los océanos (donde terminan cada año más de 1
millón de toneladas métricas), las fuentes de alimentos y
el agua, poniendo en peligro todas las formas
de vida.
Efectos perjudiciales para el medio ambiente y la salud humana
Por
lo tanto, la campaña de este año prioriza la sensibilización sobre
estos efectos perjudiciales. Pide una mayor investigación sobre
las implicaciones para la salud de la
exposición al plástico y aboga por la transparencia en
cuanto a compartir los hallazgos con el público.
El objetivo
inmediato de la campaña es eliminar rápidamente
los plásticos de un solo uso para 2030, e
incorporar este compromiso en el Tratado de las Naciones Unidas sobre
la Contaminación Plástica para 2024, garantizando la cooperación
global para abordar este problema apremiante.
El objetivo a más
largo plazo es lograr una reducción del 60 por ciento
en la producción de plástico para 2040,
para salvaguardar la salud humana y ambiental. Con
este fin, la campaña también enfatiza la importancia de invertir en tecnologías y materiales innovadores, para
allanar el camino hacia un mundo libre de plástico.
(Fuente: Agencia AICA, 22.04.2024).