
Sin embargo Egipto ya no es ni será el mismo, según dicen con toda razón los pobladores, especialmente los jóvenes que participaron en las movilizaciones pues se ha perdido el miedo y el pueblo ha aprendido a manifestarse para reclamar sus derechos y ha recuperado su dignidad y orgullo nacional.
En tanto, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas ha dado algunas señales de confianza a EE.UU. , Israel y la comunidad internacional al expresar su respeto a los compromisos internacionales y su intención de traspasar- cumplida su misión-, el poder a los civiles.
Luego de la caída de Hosini Mubarak, en el mundo, Amnistía Internacional(AI) convocaba en diversas ciudades europeas manifestaciones de solidaridad con el pueblo egipcio y tanto en Yemen como en Argelia, grupos de manifestantes se expresaban en contra de sus gobiernos, pero no en la magnitud de lo sucedido en la plaza Tahrir.(resumen agencias)
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