Una tenue luz al final del túnel, parece vislumbrarse en el convulsionado conflicto sirio, de prosperar la proposición del Grupo de Acción para Siria que apuesta por la creación de un "órgano de transición gubernamental", en la que participarían representantes tanto del Gobierno de Bachar al Asad como de los grupos de oposición.
Esta iniciativa, calificada de elemento clave para la pacificación del país, fue anunciada por el enviado especial de la ONU para Siria, Kofi Annan, al término de la reunión en Ginebra del grupo conformado por las principales potencias, en una declaración en la que el ex Secretario General de la ONU, abogó por dar pasos irreversibles para un acuerdo de transición con un plazo de tiempo determinado.
El comunicado final, fue suscrito por China, Rusia, EEUU, Francia, el Reino Unido, Turquía, la Liga Árabe, la ONU y la Unión Europea, y defiende el establecimiento de un órgano gubernamental de transición, que pueda establecer un entorno neutral en el que se pueda desarrollar una transición.
Según la propuesta, el órgano gubernamental de transición ejercitaría plenos poderes ejecutivos, tendría carácter inclusivo y debería formarse sobre la base del consentimiento mutuo y debe arrojar resultados.
El texto consensuado, alude también a una revisión del orden constitucional y del sistema legal; y derivaría en una nueva redacción de la Constitución siria, que debería someterse a la aprobación popular; con miras a llevar a cabo elecciones pluripartidistas libres y justas para las nuevas instituciones que se establezcan.
Sin embargo, Annam ha reconocido que crear un Gobierno de transición no es una tarea fácil, pero recordó que no es la primera vez que la gente se ha enfrentado y ha terminado reunida en un Gobierno; no es fácil, pero es factible. Sin embargo, se espera que no formen parte de ella quienes resulten responsables de violaciones de derechos humanos.(resumen agencias)
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