En su discurso de apertura, el Secretario General se refirió a los informes que muestran que, desde la pandemia, el 1% de las personas más ricas del mundo ha acaparado casi el doble de nueva riqueza que el resto del mundo junto.
El jefe de la ONU hizo referencia también al Plan de Estímulo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el cual tiene como objetivo impulsar las inversiones que ayudarán a alcanzarlos, además de aliviar la carga de la deuda de los países en desarrollo y mejorar el acceso a la financiación.
Guterres pidió a los bancos multilaterales de desarrollo, como el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo, que utilicen sus fondos para atraer más financiación privada a los países en menos pudientes, y a los Estados miembros que cumplan sus compromisos de ayuda pública.
En este sentido, el Secretario General explicó cómo el año pasado, el Fondo Monetario Internacional asignó 650.000 millones de dólares en Derechos Especiales de Giro, el principal mecanismo mundial para impulsar la liquidez durante las crisis. Sin embargo, según las cuotas actuales, los países desarrollados recibieron 26 veces más que los Países Menos Adelantados, y 13 veces más que todos los países de África juntos.
“Algo va fundamentalmente mal en las normas y el sistema de gobernanza que han producido este resultado”, ha declarado, y ha pedido una revisión de la arquitectura financiera global, en favor de un sistema “que sea coherente y coordinado, y refleje la realidad económica mundial actual”.(Fuente: Noticias ONU, Foto: archivo ONU).
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