La conservadora Park Geun-hye juró su cargo como presidenta de Corea del Sur para los próximos cinco años en una multitudinaria ceremonia celebrada en el exterior de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Seúl, que reunió a unas 70 mil personas.
Park, ganadora de las elecciones de diciembre de 2012, realizó antes de su investidura la respectiva reverencia a la bandera nacional y guardó silencio por los mártires patriotas de su país, según registraron las agencias de noticias internacionales.
La nueva presidente surcoreana incidió en uno de los pilares de su programa, la democratización económica, reiterando sus promesas de reducir la brecha de ingresos para ampliar las clases medias, favorecer a las pymes y garantizar la igualdad de oportunidades.
De otro lado, prometió fomentar la ciencia y la tecnología para hacer frente a la crisis económica global, que en Corea del Sur ha provocado una desaceleración del crecimiento de la cuarta economía asiática.
La nueva presidenta en su discurso, tuvo duras frases de condena a su vecino del norte, aunque dejó una puerta abierta al diálogo al proponer un proceso de construcción de confianza para sentar las bases de una nueva era de la unificación en este país dividido desde hace más de seis décadas.
Park Geun-hye, es hija del fallecido dictador Park Chung-hee considerado el principal impulsor del milagro económico surcoreano,y se convierte así en la primera mujer que ha logrado alcanzar la jefatura de Estado en su país, sucediendo a su compañero del partido conservador Saenuri, Lee Myung-bak(resumen agencias)
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