Rusia apuesta por el comienzo del diàlogo y las negociaciones entre las partes como un imperativo para solucionar el conflicto en Siria, así lo expresó en Moscú el canciller Sergei Lavrov; en el marco de la reunión que sostuvo con su similar francés Alain Juppé.El jefe de la diplomacia rusa, se mostró en desacuerdo con provocar a las fuerzas de la oposición al régimen de Bachar al Assad para que boicoteen las negociaciones, pues por esa vía se podría llegar a repetir el escenario libio.
Rusia, según el canciller, ha propuesto al Consejo de Seguridad un proyecto de resolución "que exige el fin de toda violencia, llama a las autoridades sirias a promover más activamente aquellas reformas que ya han empezado, e insta a la oposición a no provocar enfrentamientos armados ni rechazar la invitación al diálogo".
De otro lado su par francés Alain Juppé, apuntó que en estos momentos los gobiernos ruso y francés "valoran de forma diferente los deseos del pueblo sirio, que aspira a la ampliación de su libertad y democracia, y también la desproporcionada respuesta de las autoridades sirias, que ha provocado el derramamiento de sangre".
Francia confía en que Rusia revise su postura actual y apoye una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que establezca un régimen de sanciones al régimen sirio, señaló el ministro de Exteriores de Francia, Alain Juppé.
Lavrov, por su parte, destacó que ni Rusia ni Francia desean que en Siria se repita el mismo escenario de Libia.
De otro lado,China expresó su oposición a la intensificación de la presión sobre el régimen de Bachar al Asad, después de que la ONU alertara al dirigente sirio que es tarde para que aplique su plan de reforma y Europa sugiriera aumentar las imposiciones más allá del embargo petrolero.(resumen agencias)
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